Manifestaciones donde dirigentes de tu partido PSOE. exhiben pancartas que equiparan a nazis con judíos.
"Que sea la última vez que públicamente te expresas de esa manera". "No voy a tolerar que digas públicamente que el presidente del gobierno es antisemita". No sé si el empresario al que amenazas, Moratinos, te va a hacer caso. No debería. Pero por si acaso, los que abominamos del antisemitismo y del autoritarismo tenemos que alzar la voz. Lee mis labios, Moratinos: el presidente del gobierno es antisemita. ¿Que no toleras qué, Moratinos?
Eres el ministro parachoques de un gobierno antisemita que por puros intereses electorales y por alegrar los oídos de vuestros aliados antisistema del 11-M/14-M no duda en espolear el odio judeófobo de la contemporánea izquierda basura.
Perteneces a un partido antisemita que convoca manifestaciones contra Israel con olvido del terrorismo que lo azota.
Manifestaciones donde dirigentes de tu partido exhiben pancartas que equiparan a nazis con judíos y en las que se llama “hijo de puta judío” al portante de la única pancarta que condena el terrorismo.
Te sientas a la mesa del Consejo de Ministros junto a personajes antisemitas que utilizan la más infame demagogia sentimental para arrojar sobre los judíos la culpa entera de un conflicto reavivado por la voluntad de estados terroristas como Irán y Siria, precisamente cuando el gobierno de Israel había dado todos los pasos para una paz estable y duradera.
Has sido el más alto funcionario de la política antisemita de la Unión Europea en Oriente Medio, y fue justamente el sesgo antisemita de tus actuaciones lo que te granjeó el rechazo de Israel, la única parte democrática del conflicto.
Tu verdadero promocionado de aquella época –tu amigo– fue el corrupto asesino Arafat.
Coadyuvaste a poner a su disposición, como corresponde a un antisemita, recursos financieros que eran de todos los europeos y que se dedicaron a la compra de armamento que fue utilizado contra la población civil israelí.
Tu compañero antisemita Zerolo se acaba de exhibir lanzando arengas judeófobas y explicando que se manifestaba contra “los señores de la mierda”.
Él de mierda sabe un rato. Aconséjale, pues es un hombre muy limitado, que no se le ocurra enseñarse por el Irán al que defiende. Si va, no volverá.
Estás a las órdenes directas de un presidente de gobierno nauseabundamente antisemita, el líder más antisemita de la Europa actual, como se desprende de su intervención mitinera de Ibiza, de su lamentable fotografía durante la reunión de jóvenes socialistas y del modo en que ha dilapidado los activos diplomáticos acumulados por España durante largos años y que autorizaban a nuestro país como potencia mediadora. Tu presidente antisemita ha quedado fuera de juego, y lo triste es que España también.
¿Que no toleras qué, Moratinos?El Odio a Israel de la prensa europea
El odio a Israel de la prensa española
La nación que nuestra prensa odia está, por pura lógica, más interesada que ninguna otra en una paz estable y duradera. Pero no esperen que nadie se lo cuente en las columnas racistas o en las viñetas de judíos bestializados.
Que nadie espere una condena a Hezbolá, cuyo líder amenaza con nuevos ataques indiscriminados a Israel.
Corresponsales, profesores de Derecho Internacional, humoristas gráficos y columnistas patrios tienen clarísimo quién es el culpable de todo:
"La crisis, conviene recordarlo, tiene una causa y un origen: Israel. (…)
Es Israel el que (…) tiene que poner fin a una política basada en el uso criminal de la violencia.
("Detener a Israel", Augusto Zamora en El Mundo).
[Los judíos] siguen quejándose de que les echan de todas partes. Incluyendo los Reyes Católicos y la Alemania nazi. (…)
Vuelven a estar en todas partes, desde Wall Street a toda caja viviente (?).
Con ese juramento de sangre que impide cualquier tipo de generosidad con otras razas. Hasta que el espíritu sinuoso y ladino se les escapa y se ponen broncos, cargando su munición de victimismo para entregarse a la matanza vengativa." ("Judiadas", Jorge Berlanga en La Razón).
En el análisis reciente de la crisis, se obviará que el detonante fue el secuestro de un soldado israelí.
Se ignorará que el líder de Hamas Jaled Meixaal se encontró acto seguido con el embajador de Irán en Siria para recabar su apoyo.
Se olvidará que Hezbolá, siguiendo instrucciones de Irán, entró entonces en territorio israelí, mató a ocho soldados y secuestró a otros dos coincidiendo con el vencimiento del ultimátum estadounidense a Teherán para que cesara en sus planes nucleares.
No se admitirá que este trágico final de ciclo tiene un responsable llamado Irán, ni que el problema entero gira en torno a su decisión de enriquecer uranio.
En el análisis remoto del problema, se hurtarán las razones por las que el sionismo, hasta entonces minoritario, se convirtió tras el Holocausto en el motor existencial de los judíos (la Alemania nazi no "echó" a los judíos, Berlanga: los exterminó).
Se eludirá la historia de la creación de dos estados por parte de las Naciones Unidas y el inmediato ataque a Israel por parte de todos sus vecinos árabes.
Se pasará por alto que la única democracia de la región sigue existiendo porque ha ganado todas las guerras desde entonces; basta con que pierda una para que desaparezca del mapa.
Se negará que las potencias musulmanas han utilizado obscenamente a los refugiados palestinos manteniéndolos en su triste condición, en tanto que Israel –que contaba con el mismo número de refugiados judíos tras la primera guerra, y con muchísimos menos recursos que sus enemigos– dio a los suyos hogar y trabajo.
Hay que lamentar profundamente la muerte de civiles y presionar para que se investiguen, corrijan y penalicen los excesos en el uso de la fuerza por parte de cualquier estado.
En realidad, el único país de Oriente Medio donde tal cosa es posible es ese Israel que ha desalojado a sus colonos para conseguir la paz.
Seis millones de ciudadanos rodeados de cientos de millones de súbditos.
La nación que nuestra prensa odia está, por pura lógica, más interesada que ninguna otra en una paz estable y duradera. Pero no esperen que nadie se lo cuente en las columnas racistas o en las viñetas de judíos bestializados.
Por Juan Carlos Girauta.
Sr. Moratinos, si esto no es antisemitismo… si estas desafortunadas acciones no las considera antisemitas, por favor, edite un libro explicando a los ciudadanos que es ANTISEMITISMO para el gobierno de España.
Un gobierno que ignora la palabra "respeto" y desconoce el significado de la "diplomacia", un gobierno que solo representan su propia ideología, no a la totalidad de un país ni el sentir de muchos ciudadanos que nos sentimos obligados a soportarlo, con la única esperanza que se acabe pronto esta pesadilla.
Ni España ni los españoles se merecen que les represente este gobierno, tampoco como presidente un "Bocazas" que provoca vergüenza ajena.
Monmar
Os paso un comentario sobre un periodista antisemita que insulta al Pueblo Judío:
ResponderEliminarHola Daniel,
he descubierto el libro Los pésimos ejemplos de dios de Pepe Rodríguez (que dicen que se llama en realidad José Rodríguez Bonfill), y me he quedado de piedra con los graves insultos y descalificaciones antisemitas que contiene.
En una entrevista el autor ha llamdo violadores, delincuentes a los patriarcas y personajes bíblicos...
En el libro Mentiras Fundamentales, ya comentó que los judíos eran prácticamente enfermos mentales por las audiciones que ténían de Hashem.
Deberiamos de empezar a darnos cuenta que los antisemitas pueden ser de izquierdas como este caballero, que por lo cuentan es ex comunista y ateo violento.
Puedes escucharlo acá:
http://www.periodistadigital.com/periodismo/object.php?o=842122
Los cristianos volvemos a estar perseguidos, injuriados y amenazados, este tipo que se representa a el mismo como un indocumentado, un totalitario y con una falta de respeto total hacia las creencias ajenas, no merece ni un minuto de paz en su existencia.
ResponderEliminarToda esta gentuza [y los llamo de esta manera, por qué no tiene otro calificativo] que solo se representan a ellos mismos y sus ideologías Hitlerianas no son mas que unos mezquinos y la único intención es ganar dinero sin importar los medios, todos sabemos que la catadura hoy en dia de los personajes sin moral lo tienen fácil para enriquecerse, basta con hacer películas, escribir libros y mofarse de las religiones pacificas y tolerantes que no amenazan ni criminalizan ni matan a sus verdugos.
Me gustaría ver si su repugnante verborrea seria la misma hablando del Corán, o su “valentía” tan fehaciente criticando Alá.
Aurora, aprovecho para Felicitarte por la labor que estas realizando, te leo frecuentemente y todo me parece exiguo para evitar que las injusticias del pasado se repitan en esta Europa antisemita y atea, que irremediablemente esta perdiendo el norte.
Saludos
El antisemitismo actual es más virulento aun que el clásico, dado que no tiene límites...es total. Lo poco de bello y libre que vivió Europa desde la segunda guerra mundial se lo debe a valores que mucho tienen que ver con los EEUU. El temor a la fuerza del Islam puede destruír a Europa antes que esta vuelva a arrojar sus leones contra los judíos.
ResponderEliminarHe leido a este señor del que hablais Pepe Rodríguez. No comparto en absoluto su ateismo, pero su libro es una exposición crítica de hechos antiguos incuestionables por ciertos. Y por eso algunos comentarios pueden erir susceptibilidades, pero es una opinión tan digna como otra cualquiera, Crítica no es postura antisemita, simplemente es una opción ideologa como otra cualquiera.
ResponderEliminarPor otra parte la gente confunde antisemitismo, que realmente es algo pasado de moda y que casi no existe en este tiempo, con el antisionismo, que si existe y de forma latente debido a sus posturas políticas de aparteid y terrorismo. No olvidemos que durante centenares de años la Palestina de que se habla era musulmana y dependiente del Califato, aunque convivían en paz judíos cristianos y musulmanes. Los pactos políticos occidentales con el sionismo dió lugar a la invasión ilegal de esas tierras y su colonización dejando expulsados a millones de sus abitantes legales, que sumidos en la miseria (no les ayudó ni musulmanes ni occidentales)se dedican a veces a extremos lógicos de supervivencia y caldo de fundamentalismos, que no olvidemos los ha provocado occidente con sus políticas y pactos en contra de los intereses de la humanidad.
Hola:
ResponderEliminarNo se puede decir que esta película sea antisemita, ¿eh?:
http://www.cope.es/cultura/18-09-09--ultima-tarantino-malditos-bastardos-ya-cartelera-85332-1
Esta vez son los Judíos los que irán a por los nazis.Viéndolo al estilo Tarantino tiene que ser diversión asegurada.Por lo menos alguien que se atreve a hacer algo diferente.
Ánimo con el blog.
Un saludo.